¿Es difícil? ¿Se necesita invertir mucho dinero? ¿Dejaré de dormir? ¿Debo usar bata todo el día?
Muchas preguntas como esas son las que hacen todos los días aquellos jóvenes interesados en estudiar medicina (y otras que mejor ni las cuento), es comprensible lo incierto que resulta el mundo de la medicina cuando no tenemos ni siquiera un pequeño acercamiento a dicha carrera, y es que, se dice mucho, pero muy poco de lo que se rumora es tal y como lo pintan…
Ingresar a una universidad para estudiar medicina no es fácil, disculpa por comenzar diciéndote eso, pero engañarte no es mi propósito, por el contrario, en las líneas siguientes te describiré todos aquellos factores, o, mejor dicho, los que a mí me resultaron relevantes describir, que debes tener en cuenta si realmente te vas sumar a la lista de personas que trabajan día a día para alcanzar el cometido de ser “Médicos”.
1- La disciplina : Esto es por muy de lejos lo más importante, y no te hablo de una disciplina militar con 100% de obediencia, te hablo de ser capaz de poner el estudio por encima de cualquier otra cosa (excepto tu integridad personal), debes ser de esas personas que pueden sin problema alguno dedicar varias horas del día, sin interrupción, a leer, investigar, quizá debatir con compañeros, todo lo referente a las materias de tu carrera, todas aquellas actividades de ocio, que de hecho son necesarias para recrearnos, debes mantenerlas en una proporción ajustada, de tal manera que nada te impida dedicarte de lleno al estudio.
2- La economía: Aspecto que preocupa a la inmensa mayoría de quienes aspiran entrar a la carrera, pues se les ha dicho que es muy costosa. La verdad sobre esto es la siguiente; todo depende en primer lugar de en que clase de universidad vas a estudiar, si es privada lógicamente no ha de ser nada barato, pues tus profesores serán médicos, y a esta clase de profesionales con un tiempo tan limitado, debe pagárseles un sueldo decente, las instalaciones como laboratorios y demás también tienen un alto costo de mantenimiento y adquisición de equipos, por lo tanto si planeas estudiar en una universidad privada, obviamente necesitarás un buen dinero para hacerlo.
Por otro lado, si es una universidad pública en donde no se te cobra por recibir tus clases, podrías pensar que todo está solucionado en el aspecto económico, puede que si o puede que no, te explico por qué: si bien medicina, mientras se es estudiante de pregrado, no exige comprar materiales a menudo, más que tener tus uniformes y en algún momento un buen estetoscopio, la carrera requiere mucha dedicación como ya te dije en el inciso anterior, por lo tanto difícilmente tendrás tiempo para considerar un empleo, esto implica que debes recibir el apoyo económico para los gastos básicos por parte de tu familia, ten eso muy en cuenta, pues durante toda la carrera (que por lo general dura unos 6 años) representaras un gasto significativo para tu familia.
3- Otras obligaciones: Medicina es una pareja bastante celosa, y si frecuentemente estás dedicándole tiempo a otra actividad que no sea primordial, te traerá problemas en la relación, estudiar como se debe requiere claridad mental, paz, cero estrés, y para ello debes tener la menor cantidad de cargas posibles sobre ti.
Pero no me malinterpretes, no quiero decir con esto que debes renunciar a todo lo demás, las actividades de recreación son muy importantes, de vez en cuando, no somos máquinas, nuestra mente se cansa, y necesitamos darle alivio ocasionalmente, siempre que esto no se posicione por encima de la prioridad que es estudiar.
4- ¿Querer la universidad o querer la carrera?: Han sido muchas las veces que escucho alguien decir “mi sueño es estudiar medicina en la universidad *****”, a lo que yo suelo preguntar, ¿Qué es más importante para ti? ¿entrar en esa universidad particular o estudiar medicina? Debes diferenciar bien eso, comprendo que ciertas universidades gozan de gran prestigio, y otras no tanto, pero a veces la casa de estudio que más nos atrae, no es la que más nos conviene, o quizá es poco probable ingresar allí dadas ciertas circunstancias. En el mundo existen muchísimos médicos, y aunque tristemente no podamos decir que absolutamente todos son excelentes en su trabajo, estoy seguro de que todos los que pudieran llamarse buenos, no se graduaron juntos en una misma universidad.
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